Hoy en día con el dominio de las nuevas tecnologías el contenido de los tests es cada vez más accesible.

Una simple búsqueda en Google permite observar algunos de los ejercicios solucionados de pruebas usadas en centros de salud mental o en escuelas y colegios.

Por ejemplo, un rompecabezas solucionado del test WISC y WISC-R.

Eso nos lleva a algunas reflexiones.

-Indudablemente, los tests no son lo que eran. Hace no más de tres décadas sólo los psicólogos titulados podían adquirir una prueba. Hoy se venden con mayor libertad y hasta se pueden ver en Internet.

-Los tests, o mejor, las técnicas de evaluación deben cambiar. Un niño que haya visto completado el rompecabezas de la prueba que al día siguiente le van a poner en la consulta o en el colegio, es muy probable que lo complete con la suficiente rapidez hasta para tener puntos de bonificación. Su inteligencia no ha aumentado de un día para otro, pero su puntuación de CI seguro que sí.

-¿Es legítimo que cualquiera pueda colgar en la red las soluciones a los ejercicios de cuyos resultados puedan depender unas ayudas públicas o que se asigne a la persona a una u otra clase?

Esta polémica está de actualidad en relación a los derechos de los autores, de las compañías de música, cine, etc.. Y no tiene una solución fácil, sencillamente porque no se pueden poner puertas al campo.

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