El objetivo de esta colaboración es reflexionar sobre los idiomas, especialmente sobre el Ingles, contando mis experiencias y vivencias con la lengua de Shakespeare.

Pero para ello tendría que comenzar a referirme a la capacidad lingüística de la especie humana. Es algo que me maravilla tanto o más como el desarrollo de las especies a partir de la primera célula.

 Así, si no deja de ser maravilloso pensar en cómo se ha podido llegar a un cerebro humano a partir de una célula indiferenciada, también me fascina pensar cómo a partir de un sonido gutural se puede llegar al refinamiento lingüístico de un idioma.

Y todo ello a partir de la lenta evolución que va propiciando el desarrollo de unos aspectos sobre otros muchos que simplemente no terminan prosperando en beneficio de aquéllos.

Pero ciñéndonos a la lengua inglesa, me gustaría también reflexionar sobre algunos aspectos interesantes y sorprendentes.

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