El Test ADL-MAE tiene como objetivo
valorar áreas decisivas en las primeras etapas del
aprendizaje de la lectoescritura, como son: las
dificultades de lenguaje, la madurez intelectual, el
razonamiento, la orientación espaciotemporal y el
esquema corporal.
La batería ADL-MAE, a través de sus
diez subtests, intenta evaluar
1- Si el alumno ha llegado a la
madurez requerida para poder leer y escribir, y en qué
aspectos ha adquirido los niveles necesarios para ello.
Para determinarlo se aplican estos
subtests:
- Razonamiento Temporal (RT): Evalúa
la capacidad del sujeto para comprender y ordenar
secuencialmente acciones/escenas que se desarrollan
siguiendo un orden cronológico o secuencia temporal.
Consta de 22 preguntas en las que hay
que ordenar, en 15 minutos, una secuencia temporal de 4
ó 5 viñetas.
- Coordinación Viso-Motriz (CVM):
Valora la habilidad del niño para coordinar visualmente
la búsqueda y ejecución manual de unos modelos,
comparándolos con otros dados.
La prueba consiste en buscar una
figura modelo entre ocho propuestas y colocar en ella el
número correspondiente.
- Izquierda-Derecha (ID): Es un
subtest para comprobar la capacidad del niño de
orientarse correctamente con relación a objetos
estáticos y dinámicos o de personas que tiene frente a
sí, distinguiendo la situación derecha-izquierda.
El niño tiene que reconocer las
posiciones de izquierda y derecha en relación a unos
objetos y a una persona humana.
- Memoria Viso-Auditiva (M): Evalúa
la capacidad del niño para retener y memorizar, de forma
inmediata, una serie de dibujos estructurados en un todo
y presentados, previamente, de forma visual y auditiva.
El niño tiene que visualizar un
itinerario y luego marcar las figuras que aparecen
distintas a las que se le mostraron.
- Percepción de Formas (PF):
Mide la capacidad discriminativa de figuras geométricas
orientadas en distintas posiciones.
Se pide al niño que compare una serie
de figuras con otra modelo
- Esquema Corporal (EC): Valora la
capacidad parai identificar, en la silueta de una figura
humana, a modo de puzzle, la ubicación correspondiente a
las diversas partes o miembros del cuerpo, reconociendo
posiciones incorrectas por la imposibilidad de que se
den en la realidad.
2- Si se dan alteraciones que
imposibilitan o dificultan el aprendizaje de la
lectoescritura.
Esto se comprueba por medio de estas
tres pruebas:
- Aptitud Lecto-Escritora (ALE): Su
objetivo es diagnosticar una serie de alteraciones de
tipo disléxico como son las omisiones, sustituciones,
adiciones, inversiones y reducciones.
Para ello, el niño debe:
-Escribir el nombre de 20 dibujos.
-Copiar dos oraciones
-Escribir al dictado unas oraciones
- Discriminación Lectora (DL): Evalúa
la aptitud para reconocer visualmente grupos de letras,
generalmente dificultosos para el niño disléxico, por la
dificultad de diferenciar letras, sílabas y palabras de
estructura parecida.
El niño tiene que discriminar
visualmente una serie de sílabas trabadas y mixtas
dentro de palabras
- Atención-Observación (AO): Mide la
capacidad de completar dibujos a los que les falta
alguna parte o detalle esencial para su correcta
interpretación.
Consta de 27 dibujos a los que le
falta algo significativo
3- Si faltan conocimientos previos
para poder leer y escribir, para lo que se aplica el
subtest de:
- Habilidad Lingüística (HL): Mide la
habilidad del niño para discriminar letras, sílabas y
palabras comprendiendo sus significados.
Para ello debe seguir unas
instrucciones que se le dan por escrito.
El Test ADL-MAE está destinado a alumnos
de 1º y 2º de Primaria, recomendándose su aplicación en
el 2º trimestre de 1º y en el primer trimestre de 2º.
La forma de aplicación puede ser
tanto individual como colectiva, con una duración de
aproximadamente cuatro horas.
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