You better
keep your nose clean, kid, or you're going to run
into trouble you can't handle.
El origen de este
idiom tiene que ver con una expresión inglesa anterior
to keep your hands clean que tras cruzar el
Atlántico hacia América por alguna razón cambió a to
keep your nose clean y llegó a reemplazar a la
primera, con el significado de evitar la corrupción y
posteriormente evitar el mundo del delito.
Su uso en el
ejército británico al principio del siglo XX significó
específicamente evitar el alcohol (evitando meter la
nariz en el vaso)